miércoles, 2 de mayo de 2007

¿Sensibilidad pop o cine estrellado?


Cuando Marianita viene a casa reincidimos siempre en el mismo acto kamikaze: vemos una vez más ese desastre cinematográfico “intitulado” Como un avión estrellado. Pido disculpas si es necesario, pero no me banco el cine de Ezequiel Acuña, ni que Santiago Pedrero siga haciendo de adolescente a los 30, ni la actuación de Nacho Rogers (o, en todo caso, él será un excelente actor y al que no me banco es a su personaje). El punto es que gracias a las obsesiones de Marianita debemos ser las personas que más veces hemos visto esta película. Y cada vez me gusta menos: esa sensibilidad pop palermitana, ese conjunto de videoclips cool que sumados van conformando el film; ya entendí que los chicos ricos también pueden estar tristes (igual que Barbie), pero me cuesta horrores relacionarme con su tristeza.

En fin, lo lindo de ver esta peli con Marianita es que imita a Rogers a la perfección y nos reímos sobremanera (así como también nos causa mucha gracia cómo habla la Luchi, o el cambiante tamaño de Arturo –interpretado por un conejo pequeñito en interiores y uno más grande y capaz de bancarse el cruento frío invernal en exteriores-).
Lo más grave es que cada vez que la vemos hay que volver a alquilarla y en el videoclub ya me miran como si estuviera loca (debo ser la única persona en todo Longchamps que alquila Como un avión…).

2 comentarios:

caja_de_zapatos dijo...

ehh yo la alquile tambien!!
jajjaja

Anónimo dijo...

jajajajajaa! que subis mis fotos privadas eh! aii no es una reunion nuestra sino esta como un avion, no no no groso ezequiel ¿?